A veces, su pareja puede causarle dolor. Pero si aprendes estas 10 formas de amar más y de herir menos, tu vida amorosa sólo mejorará día a día.
Una vez tuve una relación muy tóxica, no por mi pareja, sino por mí. Yo era el tóxico y peligroso, constantemente contaminando y envenenando todo lo bueno que había entre nosotros. Era un fanático del control, siempre paranoico de que no era leal y tenía que tener la última palabra en todo, ya fuera una discusión o una discusión filosófica al azar.
Obviamente las cosas terminaron, ya que no pudo soportar más mi egoísmo. Cuando miro atrás, debe haberme amado mucho para soportar mi mierda durante tanto tiempo. Hizo bien en irse, ya que ninguna persona debería someterse al dolor que le inflige su pareja.
Su partida partió mi corazón en dos, y me llevó mucho tiempo entender por qué se fue. Al principio, lo culpé por no ser lo suficientemente fuerte, luego un día tuve una epifanía y me di cuenta de que era yo quien no era lo suficientemente fuerte para ser una buena persona.
La lección que saqué de esa relación tumultuosa fue que tenía que amar más y doler menos. Las cosas tenían que dejar de ser todo sobre mí porque al final, una relación es sobre dos personas que son felices juntos .
Cómo amar más y herir menos en el amor
Al final del día, amar más y herir menos implica ser menos egoísta y apático cuando se trata de los sentimientos de tu pareja. Recuerden siempre que se necesitan dos para aplaudir y ninguno de los dos será feliz si siguen tomando y no dan a cambio.
Su pareja se verá agotada por el esfuerzo unilateral que se está haciendo para que la relación funcione, así que no se sorprenda si algún día se encuentra sola.
Cuanto más se esfuerce por hacer feliz a su pareja sin comprometerlos a los dos, más probable es que su pareja haga lo mismo a cambio. Esto llevará a una relación más feliz y beneficiosa para ambos. La clave está en adoptar la filosofía que llama a amar más y a herir menos. Aquí hay algunas cosas que pueden abrazar y practicar una vez que decidan hacer un cambio para mejorar.
#1 Renunciar al control. En tu intento de hacer que tu relación funcione, puedes aferrarte a tu cónyuge, novio o novia sin siquiera darte cuenta. La necesidad de controlar a tu ser querido es una respuesta natural cuando tratas de dirigir la relación hacia donde quieres que vaya. Tanto si se trata de superar un difícil período financiero juntos, como de aprender a perdonarse mutuamente por todas las peleas desagradables del pasado, intentar controlar una relación es normal.
Puede que tengas las mejores intenciones en mente, pero debes recordar que tus intentos de controlar a tu ser querido le están haciendo daño más que cualquier otra cosa. El amor no puede ser poseído y es ridículo pensar que puedes poseer el amor de alguien. Deja de intentar herir a tu pareja controlando el flujo de la relación.
#2 Estén atentos. Tienes que estar siempre atento a los sentimientos de tu pareja. Puede que pienses que después de años juntos sabes cómo se comporta tu cónyuge, pero recuerda siempre que él o ella es un ser separado con pensamientos y sentimientos personales. Ellos son no un reflejo de usted.
No asumas que sabes lo que tu pareja quiere sólo porque han estado juntos por mucho tiempo. Su ser querido tiene derecho a sus propias opiniones, así que por favor tenga en cuenta las cosas que dice y las decisiones que toma.
#3 Tengan una mente abierta. Si quieres a alguien que piense y se comporte exactamente como tú, podrías salir con él. El único propósito de estar en una relación seria con alguien es completar las piezas que faltan y completarte a ti mismo. Aunque es muy probable que su ser querido comparta los mismos objetivos y perspectivas de la vida que usted, también debe tener la libertad de tener opiniones, creencias y puntos de vista diferentes.
Deje de intentar cambiar quiénes son y acepte que pueden pensar de forma diferente a usted. Ya sea algo importante como una creencia religiosa, o algo pequeño como querer que el salón se pinte de amarillo cáscara de huevo en lugar de beige, ten una mente abierta y respeta tus diferencias, no las ataques.
#4 Ofrecer apoyo. Ya sea algo que cambie la vida, como que su esposo quiera renunciar a su posición bancaria de alto poder para ser instructor de buceo, o algo pequeño como acompañar a su esposa a hacer mandados después del trabajo aunque ambos estén exhaustos, ofrecer apoyo a su pareja es una de las mejores maneras de amar más y de herir menos.
Cuando puedas demostrar desinteresadamente que te preocupas por la felicidad y la paz mental de los demás más que por la tuya propia, descubrirás que las cosas buenas volverán a ti y serás feliz.
#5 Decir o hacer algo agradable a diario. Deberías hacer un esfuerzo para decir algo agradable y apreciativo a tu pareja todos los días. Aún mejor, combina tus dulces palabras con acciones. Ya sea diciendo sinceramente a tu marido que lo amas y aprecias todo lo que hace por la familia, o sorprendiendo a tu esposa con un pastel de pollo casero, diciendo algo agradable y demostrando que es la manera perfecta de amar más y de herir menos.
Recuerde siempre que si puede apreciar el gesto, su pareja probablemente también lo hará. Además, ¿quién puede enfadarse contigo por servirles el desayuno en la cama o por hacer un esfuerzo por cambiar las sábanas sin que te lo pidan?
#6 Escucha, no actúes. A veces, todo lo que se necesita para amar más es escuchar y no reaccionar negativamente. En lugar de hacer un berrinche y culpar a tu novia por arruinar las reservas de la cena, acepta que se cometió un error y supéralo. Además, en vez de perseguir al colega que apuñaló por la espalda a tu marido en el trabajo, sólo escucha lo que tu marido tiene que decir y ofrécele apoyo moral en lo que decida hacer a continuación.
Tienes que darle a tu cónyuge la libertad de tomar sus propias decisiones y arreglar sus propios errores. Sé tan comprensivo como puedas, ofreciéndoles un hombro para llorar y dos oídos para escuchar. A veces, lo mejor que puedes hacer es no hacer nada en absoluto.
#7 Haz espacio para el cambio. No tengas miedo al cambio. Con el paso del tiempo, todos crecemos de formas que nunca imaginamos. El descubrimiento de nuevas experiencias es una parte normal del ser humano. Nunca culpes a tu pareja por querer hacer algo diferente. Claro que puede ser difícil adaptarse a una nueva rutina, pero a veces, el cambio puede ser justo lo que el médico ordenó. Como mínimo, puede decir que apoyó la decisión de su pareja.
Sin embargo, sólo haga cambios positivos. Por ejemplo, está bien si su cónyuge quiere un nuevo comienzo de carrera y está pensando en mudarse a una nueva ciudad. No hay nada malo en apoyarse mutuamente en ese sentido. Sin embargo, piénselo dos veces antes de ceder a su pareja si quiere practicar una relación abierta y acostarse con alguien. Piense en si es algo que puede soportar a largo plazo, si no es así, siente a su pareja y hable con calma sobre ello.
#8 Ser vulnerable. Bájate de tu caballo alto y detén la incesante necesidad de tener razón todo el tiempo. Hay una razón por la que algunas parejas no pueden hacer que las cosas funcionen. Es porque ambas partes se niegan a ceder ya que piensan que es un signo de debilidad.
A veces, sólo tienes que ser la persona más importante en una discusión. No hay nada malo en mostrar tu vulnerabilidad y admitir que estás equivocado. Demuestra que eres humano y, contrariamente a lo que puedas creer, tu pareja te amará más que nunca.
#9 Comparte más. Otra forma de amar más y de herir menos es comunicarse libremente. No le ocultes cosas a tu pareja. Más bien, compartan sus esperanzas, sueños y defectos con ellos, sin importar lo increíble que parezca. Cuando abra los canales de comunicación, animará a su pareja a hacer lo mismo. Esto resultará en una relación abierta y honesta, sin mentiras ni exageraciones. Sólo sé la mejor versión de ti mismo y todo se acomodará en su lugar.
#10 Perdona. La gente comete errores y tu pareja no es una excepción. Tienes que aprender a dejar ir la ira reprimida y perdonar a tu cónyuge. Ya sea algo tonto como no darle el infierno por olvidarse de recoger los huevos de camino a casa, o algo más serio como aprender a perdonarla por acostarse con su ex, el perdón es la clave de una relación feliz.
Si descubres que no puedes perdonar a tu pareja por haberte hecho daño, entonces tienes que tomar la decisión de irte porque al final del día, ambos serán infelices. Sin embargo, no dejen que su infelicidad les impida intentar hacer las cosas bien.
Estar en una relación es una experiencia de aprendizaje y si tienes la desgracia de no poder hacerla funcionar, míralo como una lección aprendida. Al final, amar más y herir menos no es tan difícil de hacer.
Recuerde siempre poner a su ser querido primero, y sólo se molestará después de ponerse en su lugar. A veces, las cosas suceden sin motivo y tienes que superarlo todo para mantener una relación feliz y sana.
Aprender a amar más y a herir menos en el amor no se trata de llevar la cuenta de quién gana o quién tiene más ventaja, se trata de aprender a ver tu relación desde los ojos de tu amante, y hacerles saber que aún te importa.
¿Te gustó lo que acabas de leer?